En un país en el que las series, las películas o los eventos deportivos como el motociclismo son esas cosas que se emiten entre medias de los anuncios, no es de extrañar que en la redacción de Expediente Villa seamos muy fans del mundo de la publicidad, por mucho que ésta pueda ser en ocasiones absurda. Pero hay anuncios y anuncios, amigos, y no estamos dispuestos a pasar por el aro de tener que tragarnos algunos anuncios que dan pura (por no decir puta) vergüenza ajena... El último caso nos ha pasado con el anuncio de Finíssimas de Campofrío, un horror de un minuto de duración, que te supone una muerte lenta y dolorosa... Pero es sólo unos de nuestros ejemplos, así que, mantente en antena si quieres recordar algunos de esos anuncios que dan vergüenza ajena!!
FINÍSSIMAS DE CAMPOFRÍO... MUERTE DOLOROSA!
Es el último anuncio que provocan que quieras matar a alguien, amigos, y todos sabéis de cuál hablamos... Un anuncio en el que vemos a dos luchadoras bolivianas, dos cholitas preparándose para un combate, los golpes, todos sin palabras, sólo imágenes y música de fondo... para terminar viendo que aquello en el fondo es una especie de metáfora de dos señoras de bien que luchan a muerte para ver cuál de las dos es más gocha y se lleva la última puta loncha de jamón de york de una fiesta, de un cóctel o váyase usted a saber, como si no hubiese un mañana... Un anuncio cuya versión extendida es jodidamente larga, o se hace larga, que parece una tortura lenta y larga, y cuya versión reducida sigue siendo insufrible, un anuncio de los que te hacen preguntarte "y no podían haber hecho el típico anuncio de un sandwich con una señorita delgada, como toda la vida?", que te hace cuestionarte qué tipo de flores y plantas comen y fuman los creativos antes de tener esta genial idea... Y en resumidas cuentas, un anuncio que provoca una sensación de vergüenza ajena ante lo que ven tus ojos que quieres apagar la tele para siempre, que además te deja el regustillo de no saber exactamente si están ridiculizando a las cholitas bolivianas, cuyas luchas están consideradas como todo un espectáculo, si a quien están ridiculizando es a las señoras del jamón, o si simplemente quieren que sufras con el anuncio...