MI TERTULIANO FAVORITO II... HERMANN TERTSCH SPECIAL EDITION!!

Hoy es uno de esos días en los que uno se acuerda de aquel momentazo de la película "El gran Lebowsky" en el que Walter Sobchak (John Goodman) coge un palo de golf y jode un coche mientras grita "hijo esto es lo que pasa cuando das por culo a un desconocido!!", y digamos que algo así me ha pasado esta mañana con Hermann Tertsch, que hemos tenido "un desencuentro"... Y como tenía pensado desde el año pasado hacer una segunda parte del "Mi tertuliano Favorito", esos tertulianos que obviamente no son nuestros favoritos, ya que el título es un guiño a la serie Mi marciano favorito, pero son aquellos tertulianos a los que gustosamente mandaríamos a otro planeta de vuelta, ha llegado el momento de que en la redacción de Expediente Villa nos pongamos manos a la obra con una edición especial para nuestro nuevo ídolo, Hermann Tertsch, que se lo ha ganado con creces, por dar por culo a un desconocido... No cambies de canal!

Porque es el HOMBRE, en mayúsculas, un cyborg llegado del futuro para ajustar cuentas (incluidas las de Twitter) a todo lo que le huela a rojo. El "desencuentro" que hemos tenido hoy con él ha sido ciertamente absurdo... No eran ni las ocho de la mañana y se ve que este hombre hace juernes, porque no tiene otro sentido el ponerse así por tan poco... En el día de ayer, el periodista publicó un tuit bastante polémico:

"Algún día alguien se atreverá a buscar el origen de desesperación y locura de mucho asesino en la ley de género que los despoja de derechos"

Los cruces de tuits no se hicieron esperar, y claro, le dijeron de todo, pero insultos aparte, lo destacable fue que, obviamente, le dijeron que en ese tuit daba la sensación de justificar los casos de violencia. Otros le acusaron de hacer apología de la violencia... Él se justificó con un "La cosa es callar la boca a quien no aplaude leyes de Zp sangrientamente fracasadas". Y ahí es cuando se me ocurrió decirle en un inocente tuit "creo que te has liado, los que intentan callar bocas son los del PP con la Ley Mordaza". Y del mismo modo que Bruce Banner se pone verde y se arranca la camiseta al convertirse en Hulk, nuestro ínclito Tertsch enfureció, publicando mi perfil, llamándome pelanas y diciendo que qué desgracia para el país que existan profesores como yo... Sólo le ha faltado llamarme calientapollas para rematar el tuit...

Chico... tómate una tilita, joder, pero si el nivel de debate que tienes es llamar pelanas al primero que educadamente te lleva la contraria, háztelo mirar... Si la máxima ilusión de tu vida es publicar un tuit con mi perfil para que tus seguidores me linchen, tío, tienes un problema... Y más con casi 60 años... Ir de cani perdonavidas con 16 años, lo puedo entender, pero coño, que ya tenemos una edad... De hecho, me ha recordado mucho al momento aquel en SLQH en el que Santiago Urrialde llamaba de forma velada cocainómano a Ángel Martín, y cuando Patricia Conde le preguntó si no le respondía, Ángel dijo "contestar qué? A un tío cuyo único argumento es llamarme cocainómano? No, pero si es que es ridículo...". Pero bueno, al margen de mi desencuentro ("un besi, hasta nunki") con él, ya me quedé con las ganas de incluirle en el primer artículo que hicimos. He de decir que en la redacción de Expediente Villa siempre hemos sido muy fans de Hermann, de hecho en casa le llamábamos "el borrachito" cada vez que salía en las noticias de Telemadrid. Su momento top fue cuando apareció en pijama desde el hospital haciendo el paripé porque según él, le habían pegado una paliza los defensores de El Gran Wyoming por uno de los vídeos parodia de El Intermedio.

Prueba los colchones de LoMonaco...

Hermann Tertsch acusó a Wyoming de promover que las hordas de seguidores del programa le persiguieran y le acosaran por la calle, hasta que uno le soltó una hostia. No deja de ser curiosa aquella acusación cuando es básicamente lo mismo que él ha hecho conmigo, publicar mi perfil para que sus fanboys me critiquen... Hay que tener mucha miseria moral para ir a los platos de televisión insultando a Ada Colau, llamando mamarrachos y poco menos que terroristas y delincuentes a los que hacen escraches, cuando luego precisamente tú montas un "escrache tuitero", aprovechándote de tu "fama" para colgar una diana pública con mi foto, quitarte de en medio, y que sean tus seguidores los que se pongan a desbarrar sobre mi persona, y todo por qué? Por hacerte un comentario en el que en ningún momento te he faltado el respeto, ni he cuestionado (y mira que podría...) tu profesionalidad, y tú tienes los santos cojones de poner en duda mi calidad como persona y como profesor, mientras ves sentado en tu trono, acariciando a tu gato, como tus seguidores intentan despellejarme acusándome de no sé exactamente qué? Pero bueno, volviendo al caso de cuando le soltaron dos hostias, lo más gracioso fue cuando luego la investigación fue sacando pequeñas cositas como que los testigos habían afirmado que Tertsch iba borracho, que intentó retener a una de las mujeres que se encontraba allí en el Toni 2, a las seis de la mañana, y que al final le calentaron un poquito la espalda y la cara... El juicio, obviamente lo perdió. Y el caso contra Wyoming, también... De hecho, se publicó que fue Telemadrid quien pagó las costas del juicio. Desde ese momento, Hermann se dedica a despotricar en tertulias televisivas contra todo lo que huela a rojo, aunque sea un tomate de la ensalada, y a liarla en Twitter cada dos por tres, donde se ve que le sobra mucho tiempo como para fusilar a todo hijo de vecino que le lleva la contraria.

Y a mí que me recuerda a Gerard Depardieu en esa foto...
Y no lo digo por la cara...

En mi caso en concreto, además de llamarme pelanas porque sí, entre él y sus fanboys se han dedicado a cuestionar mi profesionalidad como profesor, que es como mezclar la velocidad con el tocino. Yo en mis clases hablo de química, física, matemáticas... Según aquí el amigo Tertsch y sus seguidores, yo soy una máquina de adoctrinar a futuros perroflautas. Pues como no les diga que pongan el eje positivo de la X a la izquierda en lugar de a la derecha, ya me dirán ustedes cómo... Porque en matemáticas, uno más uno son dos. En física, en el MRU la velocidad es constante. Y en química, sodio y cloro forman cloruro de sodio... No hay mucho donde meter opiniones políticas, que todo sea dicho, me las guardo para mí y para mi tiempo libre, no para mis clases. Eso sí, por lo menos puedo decir que tengo el cariño y el respeto de padres, alumnos y compañeros de profesión, cosa que Hermann Tertsch no puede decir...  Porque si estuviese en un colegio y los periodistas estuviesen haciendo equipos para jugar a fútbol la cosa sería un poco así:

- Me pido a Carlos Alsina

- Me pido a Francino

- Me pido a Jesús Cintora

- Me pido a Alfonso Merlos

... Quince minutos más tarde, sólo quedaría un barullo de abrigos y Hermann Tertsch

- Me pido a los abrigos y los pongo en la portería, que con Hermann no quiero jugar

- Venga, vale, nosotros jugamos con uno menos para estar igualados... Hermann que... que no juegas, tío...

Porque muy bien no es que se lleve con otros periodistas... Míticas han sido sus trifulcas con periodistas como Julia Otero, de quien dijo que estaba envejeciendo malamente y calificó como nauseabundo que Julia Otero comparara la frase de Esperanza Aguirre en la que dijo que había que fusilar a los arquitectos con las frases que había denunciado la Aguirre diciendo que la estaban amenazando.

También tuvo su momentazo con Elisa Beni, en el plató de El Cascabel de 13TV, a la que dijo "Yo no quiero hablar contigo, ni siquiera discutir contigo. Estoy aquí cobrando como tú y entonces discuto contigo pero por una cosa profesional. Pero yo no hablo con gente como tú habitualmente". En cierto modo, es entrañable, porque no deja de comportarse con ese niño pequeño que cuando se enfada se lleva la pelota y dice "po ahora no fubamos". De hecho, en Twitter suele hacer lo mismo. Si le llevas la contraria educadamente, te insulta, te dice que él no habla con débiles mentales y te bloquea.

Con los del programa de El Intermedio tiene una guerra declarada, ya no sólo con Wyoming, sino con Fernando González "Gonzo", a quien evita cada vez que le ve y que le dedicó un "sois una auténtica gentuza". 

Y la última la ha tenido con Antón Losada y todo por una crítica de éste al nombramiento de José Ignacio Wert como embajador de la OCDE, algo que parece ser que sólo el iluminado de Tertsch entiende, porque ni partidos políticos, ni dicen los rumores que miembros del PP, ni diplomáticos que se encuentran en otras embajadas entienden. Y cómo lo resolvió Tertsch? Llamando rufián a Losada y de acusarle de adoctrinamiento, que parece que es un argumento al que le ha cogido cariño...

Y tendrá más trifulcas, por supuesto, y tendrá más conflictos (Máximo Pradera ya ha llegado a un punto de descojone cada dos por tres ante tanta meada fuera de tiesto), lo lleva en su ADN, pero quiénes somos nosotros para quitarle ese juguete? En fin, amigos, les seguiremos informando.